¿Qué pasa cuando compras una cola
de salmón que pesa más de tres kilos? Pues… si sois muchos en casa no pasa
nada, se gasta del tirón y listo, pero el problema es cuando en casa solo sois
4. Uno de los lomos era para marinar, así que había que gastar el otro… una parta
la consumimos en forma de tartar de salmón, pero seguía quedando salmón, así
que pensé en hacer unas albóndigas, consultando por la red encontré diferentes
propuestas, así que saqué un poco de aquí y de allí y ha salido esta receta que
nos ha gustado bastante.
Esta receta os sirve como cena
ligera, en ese caso mejor hacer las albóndigas al horno pintándolas con un poco
de aceite. Como aperitivo en una comida familiar son perfectas, eso sí no hagas
las albóndigas muy grandes, mejor que sean de bocado. Yo he usado una cuchara
de helado pequeña para formarlas.
Vamos a por la receta, vamos a
necesitar:
Para la salsa:
1 aguacate
1 yogur natural
1 cucharada de eneldo
4 cucharadas soperas de aceite de
oliva virgen extra
Sal, pimienta.
1 cuarto de cebolla dulce cortada
muy pequeñita
Para las albóndigas:
500 gr. De salmón ya limpio
1 trozo de pan de unos 3 cm
Un poco de cebollino
Una cucharada de mostaza a la
antigua
Sal de ajo
Sal, pimienta
Una cucharadita de eneldo
Perejil picado
I huevo tamaño L
Harina para rebozar.
Aceite para freír las albóndigas
Para preparar la salsa pondremos
en el vaso de la batidora el aguacate pelado y cortado en trozos, un poco de
sal, pimienta, el aceite de oliva y el yogur, trituramos todo muy bien hasta
que quede una crema fina, luego añadimos la cebolla muy picadita y el eneldo,
rectificar de sal y pimienta.
Para las albóndigas picamos
juntos el salmón con el trozo de pan y el cebollino, si tenéis una máquina para picar mucho mejor, si no es
mejor cortar el salmón con el cuchillo lo más fino posible. Una vez que
tengamos picado el salmón y el pan con el cebollino, añadimos un poco de sal,
pimienta, sal de ajo, la mostaza a la antigua, el huevo y el eneldo, mezclamos
bien y dejamos reposar un rato en la nevera.
Hacemos bolitas pequeñas y las
pasamos por harina, freímos hasta que estén algo doradas, no freír en exceso
para que no queden secas.
Servir acompañadas de su salsa.
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